viernes, 12 de diciembre de 2008

Rechazo el aparente sentido oculto: se minan las fantasías. Las que hicieron de un aire, un suspiro eterno. Mas suspirando quedo en el aire, si la tormenta me toca nuevamente en el talón. No desearía tal destino ya que mi alma errante sería.
Trastocando los sonidos, murmurando a mi oido; me liberas de esa infeliz suerte: teleteatro para no actores.
Y aunque quisiera correr, estallando y llorando, de la risa sería porque con ella por fin me has aliado.
Y en el retorno, entumecida me hallo tras las sábanas de tu ausencia; finalmente me dejo ir.