miércoles, 29 de julio de 2009

I.I

Cómo compatibilizar la afición por la muerte, el caos, y la mala fortuna; con el desapego inaudito, que aquella visión ofrece y provoca. Desapego que se convierte en rechazo, y a la vez en morbosidad, incluso en temor.
Una identificación es clave en aquel encuentro, que no media, ni mucho menos une: el azar hace ecos y sombras en aquellas imágenes, y en las propias de mi vida.
Lo enigmático, lo trágico, se convierte en puro horror carcomiendo los sentidos.
El espectáculo concluye: ¿es necesario, pues, intervenir en aquél?.

domingo, 5 de julio de 2009

Probando

"... fuera de estas molestias no me sentia demasiado desgraciado. Una vez mas todo el problema consistia en matar el tiempo. A partir del instante en que aprendi a recordar, concluí por no aburrirme en absoluto. Me ponía a veces a pensar en mi cuarto, y, con la imaginacion, salía de un rincón para volver detallando mentalmente todo lo que encontraba en el camino....Al mismo tiempo ensayaba no perder el hilo del inventario, hacer una enumeracion completa... Asi, cuanto mas reflexionabla, mas cosas desconocidas u olvidadas extraia de la memoria. Comprendi entonces que un hombre que no hubiera vivio mas que un solo dia podia vivir facilmente cien años en una carcel. Tendria bastantes recuerdos para no aburrirse. En cierto sentido era una ventaja..."

"Hay, deciamos, una pregunta del extranjero. La pregunta del extranjero, es una pregunta del extranjero, y una pregunta al extranjero, dirigida al extranjero. Como si el extranjero fuese ante todo el aquel que plantea la primera pregunta o aquel a quien uno dirige la primera pregunta....Pero tambien aquel que, al plantear la primera pregugnta me pone en duda..."

"Matando el tiempo entre las paredes de la ignorancia, en aquella fiel y docil soledad que acompaña la mismidad. Descubriendo lo ajeno y lo especial: que gran ficcion ante mis ojos se halla... de perderla me haria un ente fragil e inerte... pàginas en blanco, imagenes borrosas... chatura mental, monotonia, vacío..."

viernes, 12 de diciembre de 2008

Rechazo el aparente sentido oculto: se minan las fantasías. Las que hicieron de un aire, un suspiro eterno. Mas suspirando quedo en el aire, si la tormenta me toca nuevamente en el talón. No desearía tal destino ya que mi alma errante sería.
Trastocando los sonidos, murmurando a mi oido; me liberas de esa infeliz suerte: teleteatro para no actores.
Y aunque quisiera correr, estallando y llorando, de la risa sería porque con ella por fin me has aliado.
Y en el retorno, entumecida me hallo tras las sábanas de tu ausencia; finalmente me dejo ir.

miércoles, 22 de octubre de 2008

D-





"Si reflexionas sobre la amibición de los hombres, te maravillarás de su irracionalidad, a menos que pienses en lo que te he dicho y observes de qué modo tan extraño los hombres se mueven por la pasión de ganarse un nombre y dejar gloria impercedera en todo tiempo"

lunes, 13 de octubre de 2008

Cenit



La demanda al fín culminó, y con ella
los escollos del sentir, huyeron tras los
pasos de otras almas errantes en este
camino.


Las sensaciones por fín colorearon
ese eterno blanco sombrío, perdido
ahora en los gestos de tu ironía.

Las líneas rectas de mi rostro se
fundieron con las curvas de tus
sonrisas,
y así mis eternos
lamentos de a poco culminaron.

La suavidad de tu tacto estremece
mi cuerpo,
revive mi alma,
perpetua mi existencia...

Libres de las condenas pasadas,
en un ser nos aunamos,
el placer se eterniza:
el cenit de nuestro amor
nos ilumina.

lunes, 15 de septiembre de 2008

Desde algún lugar nace la furia, y el dolor que hacen eco en el alma, resuenan en la misma armonía; se hacen palabras cuando dejan de vascilar simplemente en los recovecos de
la oscuridad de su melodía.
Si todo aquello fuera simple y pura "palabrería". ¿Qué sentido tendría continuar explicando
lo que no tiene razón más que en su propio recorrido?. Pues el placer se hallaría en la
belleza de sus melodías, incluso de sus imágenes o de la evocación de sus propias sensaciones.
Palabras que decoran la realidad, o la realidad es pura decoración o cosmética de un
simple discurso que podría ser producto de una eterna falsedad anudada a las almas
sensibles, incluso débiles, según qué o quién lo mire.
La creencia cobraría un papel crucial en la afección que produce aquello; pasión, alegría,
desazón. Pero incluso las palabras que se evocan, ¿sólo son palabras vacías?. Remitirían
a sí mismas, no más que a una relación unívoca entre ellas, pues en su capacidad de
señalar, sólo eso pueden hacer. Pero aún, queda más.
Pensar, sin embargo, en la significación de las palabras, no haría más que seguir
remitiendo el nombre al mismo nombre. Pues el nombre aliena a la cosa
a ser lo que es para cada uno, sin más.
Restringiendose a lo dicho, más lo hecho ya no tiene importancia.

martes, 2 de septiembre de 2008

Del exilio de las palabras oscuras, al encuentro fortuito con el conocimiento de la propia ignorancia. Paradoja eficaz,¿falacia inaudita la que revela que para conocer es menestar ignorar?.
Más sólo se debe recordar lo que alguna vez estuvo y luego se olvidó. Del círculo cerrado al espiral inconcluso, misteriosa elección añadida a la lúgubre existencia multiplicada en tantas partes como de ella se hace posible.
Y si así no fuera, ¿cabe la posibilidad de una hermeneutica barata?.
Del eterno repetir a la novedad del día. El arte y la belleza de las letras, hacen eco en el alma, resuenan felizmente en un sín fín de lógicas, y argumentos como sean posibles.